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Los ‘vapers’ y cigarrillos electrónicos también son un RAEE

Desde RAEE Andalucía queremos señalar la importancia de desechar correctamente los 'vapers' y cigarrillos electrónicos ya que contienen numerosos elementos que pueden ser reciclados. Una correcta gestión de estos residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) permite reducir y evitar su impacto sobre el Medio Ambiente.

Actualmente, existe una amplia variedad de dispositivos electrónicos para vapear. Entre todos ellos pueden destacarse dos tipos: los MOD, similares en forma a una petaca, y los POD, de tamaño más reducido y menor potencia. 

Estos aparatos necesitan baterías que proporcionen la energía eléctrica necesaria para que los líquidos aromáticos se calienten y evaporen. Por lo tanto, se consideran residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) cuando dejan de funcionar. 

Los ‘vapers’ desechables han adquirido recientemente mucha popularidad gracias a su facilidad de empleo. Dependiendo de la potencia de la batería, la cantidad de líquido que tengan y el uso que se haga de ellos, proporcionan un número determinado y limitado de caladas. Esto hace que, cuando se agotan y dejan de funcionar, deba tenerse en cuenta la necesidad de desechar los ‘vapers’ correctamente para que puedan ser reciclados.

Estos aparatos electrónicos contienen compuestos químicos que resultan muy dañinos y contaminantes. De ser arrojados a contenedores de basura convencional, estos aparatos acaban por acumularse en vertederos donde entran en contacto con otros residuos. 

Con el tiempo, las cubiertas protectoras de las baterías se desgastan, liberando las peligrosas sustancias que contienen en su interior. Metales pesados como el mercurio, el plomo o el cadmio que se filtran en el subsuelo y contaminan la tierra o los acuíferos.

Por otra parte, las partes externas de los vaporizadores se fabrican con aleaciones de acero inoxidable, aluminio o latón, y también contienen pequeñas partes fabricadas con plásticos, como la boquilla por la que se aspira el humo. Todos estos materiales pueden ser extraídos, tratados y convertidos en nuevos aparatos electrónicos u otros productos muy comunes de encontrar en nuestra vida cotidiana.

Por todo ello, desde RAEE Andalucía recordamos que los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos deben depositarse en puntos limpios, para ser desechados y reciclados. De esta forma, se logrará fomentar el concepto de economía circular y proteger la naturaleza de las graves consecuencias producidas por la contaminación.

Además, recomendamos no utilizar este tipo de aparatos ya que según la OMS son perjudiciales para la salud.