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Errores comunes que aumentan el consumo eléctrico en casa

Ahorrar energía no solo reduce la factura eléctrica, sino que también disminuye la huella ambiental de nuestros hogares. Muchos electrodomésticos consumen más de lo necesario debido a malos hábitos, configuraciones incorrectas o falta de mantenimiento. Identificar estos errores y corregirlos puede marcar una gran diferencia en el consumo eléctrico y en el impacto ambiental.

Frigorífico y congelador

  • No ajustar la temperatura correctamente. Un error frecuente es mantener el frigorífico demasiado frío o el congelador demasiado alto. 
  • Abrir la puerta con frecuencia. Cada vez que abrimos la puerta, entra aire caliente y el aparato tiene que trabajar más para recuperar la temperatura. Organiza los alimentos y planifica lo que vas a sacar para reducir las aperturas. 
  • Colocar el frigorífico cerca de fuentes de calor. Evita situarlo junto a hornos, radiadores o al sol. La exposición a calor externo obliga al frigorífico a consumir más energía para mantener la temperatura adecuada.
  • Mantenerlo limpio y con espacio. No sobrecargues el frigorífico y limpia las rejillas traseras y las gomas de las puertas. Esto mejora la eficiencia y reduce el consumo eléctrico.

Lavadora y lavavajillas

  • Llenar parcialmente el tambor. Utilizar la lavadora o el lavavajillas con poca carga desperdicia agua y energía. Lo recomendable es esperar a tener la carga completa o utilizar programas de media carga si tu electrodoméstico los tiene.
  • Usar programas calientes innecesarios. Lavar a temperaturas altas consume mucha electricidad. Para ropa poco sucia, utiliza ciclos cortos o fríos, y evita programas de calor prolongados si no son necesarios.
  • No limpiar los filtros y las rejillas. Los filtros o las rejillas sucias obligan a los electrodomésticos a trabajar más, lo que aumenta el consumo energético y el desgaste del aparato. Revisa y limpialos periódicamente.
  • Secado y centrifugado eficiente. Evita ciclos de secado excesivos en lavavajillas y selecciona centrifugados adecuados en la lavadora. Esto reduce la energía utilizada sin afectar los resultados de limpieza.

Hornos y microondas

  • Precalentar sin necesidad. Precalentar siempre puede ser innecesario, sobre todo si vas a cocinar alimentos que no requieren una temperatura exacta desde el inicio. Evalúa cuándo es realmente necesario.
  • Abrir la puerta constantemente. Cada apertura deja escapar calor y el horno consume más energía para recuperar la temperatura. Organiza los alimentos antes de introducirlos y utiliza la luz interna para vigilar la cocción.
  • Usar horno grande para pequeñas cantidades. Si solo necesitas calentar o cocinar pequeñas porciones, considera usar microondas o un horno más pequeño para no desperdiciar energía.

Otros electrodomésticos y aparatos eléctricos

  • Dejar aparatos en modo “stand by”. Muchos dispositivos consumen energía aunque estén apagados. Apaga completamente los aparatos o desenchúfalos si no los vas a usar durante largos períodos.
  • No limpiar los filtros de aire o aspiradoras. Los filtros sucios aumentan el esfuerzo del motor y el consumo de energía. Limpia o reemplaza los filtros regularmente.
  • Uso ineficiente de iluminación. Aprovecha al máximo la luz natural y utiliza lámparas LED de bajo consumo. Apaga luces innecesarias y considera sensores de movimiento en zonas de paso.

Hábitos generales para reducir el consumo

  • Organiza los electrodomésticos y enchufes para evitar el uso simultáneo innecesario de varios aparatos.
  • Planifica la carga de lavadoras, lavavajillas y hornos según las horas de menor demanda eléctrica si tu tarifa lo permite.
  • Revisa periódicamente el estado de los cables y enchufes para evitar pérdidas de energía.
  • Educa a toda la familia en hábitos de consumo responsable y conciencia energética.

Cuando renueves tus electrodomésticos, es importante llevar los antiguos a los puntos de recogida de RAEE. Allí serán gestionados de manera responsable, evitando que terminen en la basura y permitiendo que los materiales se reutilicen o reciclen correctamente. Esto no solo protege el medio ambiente, sino que también fomenta la economía circular en nuestra región.